Brunyols de l'Empordà o Bunyols de Quaresma

02 marzo 2014

Lo que se cuece en : Catalunya 





Els bunyols junto con la Mona de Pascua son el dulce de Semana Santa que más triunfa en Catalunya. Es tradición de los payeses en el día de Viernes Santo y els brunyols de l'Empordà es una de las recetas en sus múltiples variedades.  No pueden faltar bajo ningún concepto en las mesas de cualquier parte de Catalunya .

No es la primera receta de brunyols que pongo en el blog pero es que están tan ricos que no quiero dejar de recomendarlos. Lo que más me gusta es que según dicen, a medida que pasan los días la consistencia es más sabrosa, aunque la verdad es que no he tenido necesidad de verificarlo pues siempre que los hago se acaban en una sentada.

Se pueden hacer como rosquillas o también una vez dada la forma de bola, se presiona  con el dedo y adquiere una forma característica que los diferencia de los típicos bunyols de vent.

Els bunyols de vent están hechos con una masa más floja y al ponerlos en el aceite bien caliente la masa se infla y se dan la vuelta por si solos quedando su interior vacío. Se pueden rellanar luego de diversas cremas según el gusto y la zona en dónde se consuman.

En mi caso caso he intentado hacer els brunyols de manera uniforme, redondeada y de tamaño pequeño, ya que me gusta se puedan degustar de un solo bocado. Luego se acompañan  de un sorbito de vino dulce, cerramos los ojos y nos dejamos transportar por la combinación de aromas y sabores que desprenden.

Recomiendo no hacer muchos de una sola vez¡Son adictivos!








Ingredientes:


  • 350 g harina floja
  • 20 g levadura panadería
  • 150 g de azúcar
  • Un poco de anís en grano
  • 65 g de mantequilla 
  • 2 huevos pequeños
  • Piel de medio limón
  • Un pellizco de sal
  • Media ramita de canela 
  • Una cucharada pequeña de matalauva  (anís)
  • 100 ml. leche tibia
  • 25 ml. de vino dulce (opcional vermut)





Procedimiento:


  1. En un cazo ponemos la leche, la piel de limón, la ramita de canela, la matalauva y dejamos calentar hasta que alcance el hervor.
  2. Sacamos los ingredientes y dejamos templar. Colamos la leche.
  3. Añadimos la levadura a la leche y  removemos bien hasta que se deshaga.
  4. En un procesador, mezclamos la harina con el azúcar y la mantequilla a temperatura ambiente.
  5. Añadimos los huevos uno a uno, integramos bien 
  6. Vertemos el vino dulce y seguimos batiendo a velocidad baja.
  7. Incluimos la leche  y cuando todo esté bien integrado y la masa consistente, dejamos reposar unas dos horas o hasta que veamos que aumenta el volumen al menos el doble de su tamaño inicial.
  8. Calentamos aceite en una sartén. El aceite debe ser suave de manera que no quede demasiado fuerte de sabor.
  9. Ponemos aceite en las  manos para que no senos pegue la masa. Cogemos una porción muy pequeña de masa y formamos bolitas de tamaño de una nuez. Las ponemos en el aceite bien caliente.
  10. En cuanto veamos que se van dorando, les damos la vuelta. n de quedar de un color tostado oscuro.
  11. Cuando estén bien dorados,  los sacamos y los ponemos encima de un papel absorbente para que vayan dejando  en él el exceso de aceite.
  12. Con un pincel, ponemos anís en cada bola y las rebozamos con azúcar. No debemos pasarnos con el anís a menos que nos guste mucho ;-). Si no nos gusta el anís, una vez sacados los brunyols de la sartén, los pasamos al azúcar en caliente. Si los dejamos enfriar, no se pegará el azúcar,
  13. Ponemos en un plato y servimos.



¡Feliz semana!

3 comentarios

  1. Que bocadito tan delicioso!!!! Nunca los he preparado, pero después de verlos en tu cocina estoy deseando prepararlos!!
    Y así, de bocado;)
    Un beso Ángeles y muy feliz semana;D

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  2. Huuunnnn ¡¡ menudos bocaditos para no parar de comerlos, besos

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